29.11.09

chorra

ayer estaba en una fiesta y en el baño me encontré un par de ojotas. las vi y las dejé ahí. pero al rato me dolían los pies de los zapatos y recordé lo que estaba en ñoba así que decidí buscarlas y ponérmelas. y seguían ahí, esperándome. me las puse y seguí bailando en ojotas en el patio justo en el momento en que unas estúpidas borrachas se tiraban a la pileta y mojaban a todo el mundo, asi que encima mis zapatos zafaron de un baño perjudicial para su salud. las ojostas eran de un hombre, ahora se las voy a regalar a mi hermano. porque me las traje a mi casa, ja
soy una ladrona

2 comentarios:

Catita, dijo...

graciosa, a mí me caían simpáticas las que se tiraron a la pileta (aunque un poco menos cuando empezaron a salpicar). de hecho no tenía ganas de mojarme para no enfermarme, pero me dieron ganas después de que las vi. muy divertido (muy yanqui también). si hubiera tenido otra muda de ropa me lanzaba al agua pato de una!

perez dijo...

Hola, chorra. Volví.